Las violencias en las instituciones educativas sólo pueden ser comprendidas en el marco de los contextos de fragmentación, descivilización y desigualdad, los cuales producen consecuencias personales. Asimismo, los sentidos subjetivos sobre las violencias fabricados por los actores escolares se vinculan a las transformaciones en la sensibilidad de la época que vivimos y a las condiciones específicas de constitución de identidad, de producción de la sociabilidad y de construcción de la autoridad. Nos interrogamos sobre la relación entre la sensibilidad por la violencia y los sentidos y sinsentidos que los jóvenes escolarizados de zonas urbanas periféricas construyen sobre su existencia social y sobre los límites y posibilidades simbólicas de constitución de identidad. Retomando pensamientos de autores como Elias, Bourdieu y Wiewiorka y afirmándonos sobre la producción académica del grupo, consideramos que el sinsentido en la perspectiva futura de vida es suficientemente relevante para ser considerada una fuente de violencia a indagar en nuestra investigación a partir del punto de vista de los estudiantes. Este proyecto se sitúa en un enfoque teórico-metodológico de carácter constructivista, procesual y relacional. Consideramos que en el análisis de la educación escolar es preciso dar cuenta de la dialéctica entre los condicionamientos objetivos y los sentidos que construyen los actores en su interacción. Las actividades que se desarrollarán a lo largo del proyecto consistirán en producciones teóricas e indagaciones empíricas: trabajo de campo en escuelas de educación secundaria; sistematización y análisis de artículos periodísticos de medios gráficos ligados a la temática de violencia, jóvenes y escuela; y promoción de actividades de transferencia al sistema educativo. Un propósito medular es contribuir a la formación y especialización de investigadores sobre la problemática del proyecto. El propósito es producir conocimiento que aporte a la constitución de una sociología de la violencia en el sistema educativo, en el marco de una sociología de las desigualdades escolares y, más particularmente, de una sociología de la exclusión. El objetivo consiste en producir aportes teóricos y empíricos sobre la construcción social de las violencias en la escuela y edificar una alternativa teórica desde una perspectiva socioeducativa alternativa a la que intenta establecer el sentido común hegemónico (doxa) penalizante y de estigmatización hacia los jóvenes